EL GRUPO NO DIO OPCIONES

Lamentable derrota la sufrida el sabado contra el Grupo Covadonga. Para empezar fuimos siete. Encima debido a una confusión dejamos vacío el octavo tablero en vez del tercero (aunque a la postre nos sirvió ya que fue en el que puntuamos). Menos mal que al final Sergio puntuó y de que manera. En un final de rey contra alfil y dos peones de Javier, con siete segundos en su reloj contra treinta del abogado gijonés, consiguió que le ahogaran su rey. Veamos a continuación la partida

Sergio-Menéndez Rey

En el primer tablero Senén planteó la defensa hipopótamo, que tan buen resultado le había dado en anteriores ocasiones. Javi sorprendido por la novedad no continúo tal como lo había hecho Julen Arizmendi contra Senén y se embarcó en un cuasi obligado sacrificio de pieza por tres peones cuando su posición empezaba a resquebrajarse. Senén aguantó bien con la pieza de más y justo cuando parecía haber superado la contingencia sucedió el descuido habitual este año y perdió dos piezas a cambio de torre. Aún así la posición no era tan desesperada como para abandonar ya que se quedaba con calidad contra dos peones pero con cieras chances (al menos para Fritz).

En el segundo tablero, Chema tuvo una buena partida hasta que obvió comer el peón en sexta de Ceñal, que a la postre llegó a la septima, y allí ya fue imposible hacer nada.

Sergio protagonizó una partida típica de las suyas, vamos ininteligible para el resto de los humanos. Se quedó en la apertura con torre y peón a cambio de dos piezas, pero estuvo todo el tiempo empujando hasta llevar un peón a septima. En esos momentos, ambos jugadores en zeitnot cometieron diviersas imprecisiones que condujeron al final reseñado anteriormente en el que Menéndez Rey ganaba moviendo y esperando a que a Sergio le cayera la bandera. Sin embargo, y es extraño en un jugador de su experiencia, se le notaba un nerviosismo impropio. (mítica es la escena de Javier apuntando la partida cuando le quedaban menos de 5 minutos e intentando poner el capuchón al bolígrafo, cosa que no logró debido a los atenazantes nervios). Si a esto añadimos que antes de empezar la partida sus propios compañeros se metían con él diciendo que si no hacían ocho era por su culpa (y a la postre acertaron).

De mi partida decir que mejor hubiera hecho lo que Diego que se metió en la cama y dijo que no quería jugar. Esta vez no llegué ni a la jugada 20 y eso que llevaba las blancas.

Calleja luchó toda la partida pero fue insuficiente y en la última jugada del control cometió el error decisivo que le costó el punto.

Eduardo era el que tenía una mejor partida hasta que le dió por cambiar su SuperCaballo por el alfil malo de Kike. A partir de ahí perdió diversos tiempos para colocar sus piezas y un ataque en la columna h decidió la partida.

Cobi estuvo toda la partida luchando con un peón de menos que al final fue suficiente para que León ganara.

Diego, lo dicho, ya se sabía lo que iba a pasar y decidió no venir.

En fin que continuamos con la trayectoria negativa de este año. Esperemos que cambie o sino ya se sabe...

volver a la portada