EMPATE ANTE EL CAMPEON

Ya lo decía Helenio Herrera con 7 mejor que con 8 (bueno el decía con 10 mejor que con 11, pero p'al caso patatas). Lo curioso del tema es que a las 4 de la tarde eramos siete por lo que decidimos dejar el tablero de Prendes libre, pero a las 16:15 apareció...nuestro octavo tablero. De todas formas la maniobra táctica vangaaliana salió bien en esta ocasión.

En el primer tablero, Senén resurgió de sus cenizas y le dió una soberana paliza a nuestra WIM, quien por otra parte ayudó todo lo posible.

En el segundo tablero se disputó una partida de poder a poder. Una vez finalizada la apertura se llegó a un medio juego típico del Pelikan en donde Chema se jugó el todo por el todo con 31... d3, seguido de un sacrificio de torre especulando con un continuo.. Marcos se defendió bien quedándose con calidad de más para evitar las tablas, pero Chema consiguió liarlo lo suficiente y amparándose en un peón en septima pudo sacrificar su dama por dos torres y llegar a un final en el que Marcos tuvo que conformarse con las tablas.

En el cuarto tablero, tras una partida bastante igualada, nuestro Sergio entró en un final de caballos que tras cambiarlos le condujo a un final de peones perdido.

En el quinto tablero Canteli y David jugaro una partida bastante igualada, pero dos imprecisiones del jugador del Antonio Rico le condujeron a la derrota.

En el sexto tablero, el seleccionador asturiano Calleja realizó una buena partida de ataque que le condujo a la victoria.

En el septimo tablero, Fidalgo salió de la apertura con clara ventaja y tras ganar dos peones se confió un poco dejando que Eduardo llevara su peón a septima y una vez allí la diferencia de material no contaba tanto. De hecho, Fidalgo tuvo que sacrificar una pieza a cambio del peón pero llegó a un final perdido en donde continuó jugando especulando con el tiempo. Sin embargo con pieza de más y cinco minutos Eduardo no tuvo problemas para hacerse con el punto.

Cobiella y Aparicio realizaron una partida de lo más surrealista en la que Cobiella estuvo todo el tiempo nadando contracorriente y cuando ganó un peón decidió aceptar las tablas que le propusieron. Aun así es un punto de confianza para su maltrecha moral.

En resumen, victoria por 4 a 3 que debe darnos moral de cara a próximos enfrentamientos.

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